Por Ángel Bonet - 02/11/2012

El pasado fin de semana, participé en la convención de ventas de una importante cadena de retail. Yo daba una sesión de worshop a los responsables de tiendas propias y franquiciados. El objetivo de la ponencia era impulsar el espíritu comercial, ya que estaban cayendo un 5% en ventas en España, like for like (a m2 cuadrados comparables), y el equipo directivo, tenían la sensación que se había bajado los brazos.

Por Ángel Bonet - 02/11/2012

El pasado fin de semana, participé en la convención de ventas de una importante cadena de retail. Yo daba una sesión de worshop a los responsables de tiendas propias y franquiciados. El objetivo de la ponencia era impulsar el espíritu comercial, ya que estaban cayendo un 5% en ventas en España, like for like (a m2 cuadrados comparables), y el equipo directivo, tenían la sensación que se había bajado los brazos.

Respecto a los medios de pago, que todos usamos todos los días sin prestarle una gran atención, hay algo que la mayoría de los ciudadanos ignoramos: que los costes de mantenimiento de los diferentes medios de pago son bastante elevados, tanto en sus cifras globales, como para la sociedad a la que están dando servicio.

En las sociedades preindustriales, quién era quien se resolvía a una escala muy local, las personas quedaban circunscritas en aldeas o pueblos, y su identidad era resuelta por su origen, profesión o característica fundamental (hijo de, carnicero, o tonto del pueblo). Bajo una perspectiva actual, el problema de la identidad ya existía, pero era muy pequeño y con pocas implicaciones.

¿Por qué es tan importante la lucha contra el fraude?