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Cuidado con quedar en "Off side"!

PorBen Schneider - 03 / 01 / 2012

Toda actividad empresarial siempre ha estado expuesta a enfrentar eventos inesperados y a adaptarse al cambio, pero la manera de gerenciar negocios hoy es mucho más compleja de lo que era hace apenas un par de décadas. Mientras que antes, los procesos realmente complejos se entendían solo a nivel de grandes organizaciones, hoy la mayoría son considerados complejos, por la interconexión con múltiples otros, debido al desarrollo de las tecnologías de información que traen grandes beneficios.

Los sistemas complejos son mucho más difíciles de controlar que los complicados. Estos dos términos, no son equivalentes. Los sistemas complejos interactúan de manera tal que se tornan imprescindibles, lo que si sucede en los sistemas complicados. Por ejemplo, la cabina de un avión da la impresión que pilotarlo es muy difícil por la gran cantidad de controles; sin embargo, estos hacen seguimiento al vuelo, existiendo protocolos definidos para cada incidente.

Los sistemas complejos, en contraste, llegan a niveles a veces no comprendidos por la mente humana y es en ellos a los que los gerentes se enfrentan hoy. Estos procesos tienen tres características: La "multiplicidad", de interacciones, la "interdependencia" de sus elementos y la "diversidad" de los procesos por administrar.

Si uno pretende manejar una organización compleja como si fuera una complicada, estaría cometiendo un serio error. Por ejemplo, el desarrollo de las tecnologías de información y comunicaciones ha acercado a los operadores de telefonía al negocio de pagos electrónicos, compitiendo directamente con empresas que operan tarjetas de crédito. Mientras estas últimas requieren comisiones por compra y cargos anuales por renovación, los primeros no las necesitan y por lo tanto se convertirán en competidores de peso en esta industria. Mientras el ecosistema de los negocios se hace más complejo, este tipo de alteraciones en los mercados hoy, se harán más fuertes.

Es vital estar alerta y comprender las novedades tecnológicas y cómo estas pueden transformar una industria y, basado en ello, aplicar la prospectiva para evolucionar en forma proactiva, antes de ser sorprendidos y quedar en "offside".