31 Mayo 2018España
  • La transformación digital de la atención al paciente pasa por la integración eficiente de todos los canales de relación y por la eliminación de barreras entre el mundo físico y el digital para impactar en los resultados de salud
  • La experiencia, unida a la aplicación de tecnologías disruptivas, como el IoT, el Big Data o la Inteligencia Artificial, hace posible un acceso inmediato a la información por parte del ciudadano y de los servicios de salud, quienes, más allá del tratamiento de dolencias, pueden ayudar al paciente a prevenir enfermedades y mejorar su calidad de vida
Fonendoscopio con un ipad

Los modelos basados en la experiencia omnicanal, es decir, la integración de todos los canales que utiliza el ciudadano para relacionarse con el sistema o las entidades de salud, constituyen la base de las nuevas estrategias centradas en el paciente para crear vínculos a largo plazo que permitan ofrecerle una atención más personalizada al tiempo que se mejoran los resultados en salud de la población y se optimizan los gastos del sector.

Así lo recoge el informe “La salud hacia la experiencia omnicanal”, que acaba de presentar Minsait, la unidad de transformación digital de Indra, y en el que se identifican los ocho vectores clave que funcionan como pilares de la experiencia omnicanal y que serán una de las palancas de cambio del sector: accesibilidad, personalización, fluidez y ubicuidad, salud basada en valor, servicios end-to-end, Smart Data, Inteligencia Artificial e Internet of Medical Things (IoMT).

“La hiperconexión de la población ha provocado que los ciudadanos estén más informados y quieran participar en la toma de decisiones sobre su salud, lo que hace necesario que las entidades del sector utilicen la tecnología como elemento habilitador de un nuevo modelo bidireccional que permita transformar el negocio actual, digitalizando la interacción y operación para mejorar el acceso a los pacientes y optimizar costes”, explica Ángel Hortal, director de Nueva Oferta y Transformación Digital de Sanidad de Indra.

El nuevo modelo de experiencia omnicanal debe, además, promover la integración de todo el ecosistema (centros de salud, hospitales, entidades, ciudadanos y fuentes externas) para asegurar la disponibilidad de la información en cualquier ámbito asistencial y garantizar la accesibilidad, eficiencia y calidad de los servicios prestados. “El objetivo es eliminar las barreras entre el mundo físico y el digital y definir un modelo de relación que permita empoderar a los pacientes y ciudadanos, promover, la vida saludable, prevenir enfermedades y acceder a servicios y productos de forma más ágil”, afirma Ángel Hortal.  

Según destaca el estudio, el nuevo modelo debe facilitar la creación de un vínculo emocional con el paciente, además de permitir conocer sus inquietudes y necesidades y, con ello, alinear la estrategia con las expectativas de la población, transformando los resultados en valor para ellos y para la organización. 

“El paciente se convierte en el eje principal sobre el que empresas y servicios de salud deben fundamentar todas las experiencias que se ofrezcan a nivel presencial y digital, desde la petición de una cita médica hasta la dispensación de un fármaco”, declara Ángel Hortal. 

La combinación de los ocho vectores clave que se destacan en el informe permite plantear escenarios que den respuesta a los retos a los que se enfrentan las organizaciones de salud en un modelo de relación continua que tenga en cuenta todos los puntos de interacción con el ciudadano.

De la accesibilidad a la salud basada en valor 

En primer lugar, destaca la accesibilidad. Según el estudio, el nuevo modelo debe optimizar la gestión de la demanda y esto es posible iniciando la transformación a través de un canal considerado de uso frecuente, como podría ser el móvil, y de un servicio de primera necesidad, como es la citación. “Se ha demostrado que el uso del móvil en la gestión de citas es mucho mayor que en el resto de los canales, lo que convierte a este servicio en una palanca para incorporar más iniciativas digitales. Además, aporta importantes beneficios, como la reducción de los tiempos de espera, errores de agenda y, con ello, de los costes”, explica Ángel Hortal.

Los expertos de Minsait también consideran clave la personalización de la oferta de productos y servicios, no solo a partir de las preferencias o perfil de salud de cada individuo, sino de su momento vital. En esta línea, organizaciones del sector están, por ejemplo, redirigiendo sus estrategias hacia modelos que apoyan labor de prevención y promoción de la salud. El informe recomienda utilizar la experiencia de los pacientes como palanca de cambio y que los desarrollos se realicen sobre tecnologías ya adquiridas por los ciudadanos y estándares ya asentados en la industria de salud para reducir riesgos de lanzamiento y asegurar la aceptación. 

La nueva experiencia omnicanal tiene que ser también ágil, fluida y ubicua, o lo que es lo mismo, debe eliminar barreras como la localización, el tiempo o los silos de información (“donde sea y como sea”) y promover que el mundo físico y digital confluyan en una misma experiencia. Para conseguirlo, es necesario contar con sistemas interoperables, digitalizar y automatizar procesos como el triaje (gestión del riesgo clínico cuando la demanda y las necesidades clínicas superan a los recursos) e incorporar sistemas de interacción médico – paciente novedosos para descongestionar las consultas y servicios de urgencias, además de potenciar las estrategias mobile first (prioridad en el acceso a servicios de salud a través de dispositivos móviles) para deslocalizar los servicios médicos.

Un importante vector que actuará como palanca del sector es la transición hacia la “salud basada en valor”, cuyo fin es promover modelos de riesgo compartido entre todos los actores. “La idea es incluir nuevos sistemas  de pago y retribuir, no por actividad, sino por mantener a los pacientes lo más sanos posible, un modelo que no solo disminuirá la carga económica del sistema de salud público sino que promoverá seguros de salud personalizados”, señala Ángel Hortal. Para lograrlo, es necesario apoyarse en tecnologías que faciliten la explotación eficaz de los datos y estratificación del riesgo clínico así como educar y concienciar a la población para promover estilos de vida saludables y reducir el impacto de enfermedades que se pueden prevenir.

Otra de las principales bases de la nueva experiencia es cubrir todos los puntos de contacto del ciudadano con el sistema de salud a través de nuevos servicios y modelos de atención. “Se trata de ofrecer al paciente la posibilidad de realizar la actividad completa, de principio a fin, desde el punto de contacto que esté utilizando y, en caso de que continúe desde otro sistema, este le recuerde en qué punto de la experiencia se había quedado”, explica Ángel Hortal. El informe destaca el papel crucial que juega en este ámbito la historia clínica, como punto de unión, junto a la inversión en plataformas CRM, IoT y de integración, que permiten construir las conexiones y capacidades necesarias para implementar los modelos de relación entre todos los stakeholders.

La aportación de los datos

El estudio subraya también el papel de las tecnologías digitales como vectores de innovación y soporte fundamental de generación y entrega de valor al servicio de la organización, los profesionales de la salud y los pacientes para proporcionar una experiencia omnicanal personalizada.  

Para Minsait, el uso inteligente de datos, o Smart Data, es clave a la hora de aportar un valor real que incida en los resultados de salud de la población, combinando la información clínica con la proporcionada por otras fuentes de datos externas, tanto a nivel analítico para mejorar los procesos asistenciales y administrativos (por ejemplo, la estratificación del riesgo clínico en una población determinada), como a  nivel predictivo (por ejemplo,  para adelantarse a epidemias o identificar picos de actividad en un hospital). El gran reto tecnológico pasa por evolucionar hacia fuentes de información interoperables y abiertas, que se nutran de datos internos y de los que proporcionan los stakeholders y pacientes, con el fin de ofrecer servicios y soluciones personalizados. 

Asimismo, la Inteligencia Artificial –una de las tecnologías con mayor proyección para Minsait-  permite deslocalizar cada vez más los servicios salud a través de soluciones automáticas de valoración del paciente, redirigir los esfuerzos de los profesionales clínicos hacia las áreas donde de verdad se necesita, e incorporar una visión basada en datos reales, más allá de la propia experiencia del profesional. Según destaca el estudio, las grandes líneas están enfocadas al reconocimiento de patrones de enfermedad y los sistemas de ayuda a la toma de decisiones, aunque advierte que todavía existe un largo camino para humanizar la interacción a través de soluciones como los chatbots.

Por último, el informe destaca que la aportación del Internet of Medical Things (IoMT) es clave para acelerar la digitalización del sector dado que, dentro de la experiencia multicanal, se concibe como un punto más de contacto entre las personas y las organizaciones de la salud, no solo para transferir información en tiempo real sobre los pacientes, sino también para promover modelos de atención personalizados y mejorar la adherencia de los pacientes a los tratamientos, además de promover la autogestión de la enfermedad. En este caso, el reto pasa por potenciar la interoperabilidad de todos los dispositivos con los sistemas de salud así como con las plataformas de explotación, además de promover su uso a través de la gamificación. 

Encuentra aquí el informe completo.

Acerca de Minsait

Minsait es la unidad de negocio de transformación digital de Indra y su oferta está orientada a la consecución de resultados inmediatos y tangibles. Cuenta con equipo multidisciplinar de más de 3.000 expertos en Europa y Latinoamérica que se agrupan en torno a cuatro grandes líneas de servicio: consultoría de negocio, consultoría y tecnología digital, productos digitales propios y ciberseguridad. El enfoque integral que promueve Minsait requiere, más allá de la puesta en práctica de iniciativas de transformación, de un profundo replanteamiento del modelo de gestión. La adquisición de Paradigma, líder en la oferta en formato "digital nativo" con una cultura innovadora y metodologías agiles, completa la propuesta de valor de Minsait, cuya oferta diferencial cubre, de extremo a extremo, todas las necesidades de transformación digital de empresas e instituciones. 

Acerca de Indra

Indra es una de las principales compañías globales de tecnología y consultoría y el socio tecnológico para las operaciones clave de los negocios de sus clientes en todo el mundo. Es un proveedor líder mundial de soluciones propias en segmentos específicos de los mercados de Transporte y Defensa, y la empresa líder en Tecnologías de la Información en España y Latinoamérica. Dispone de una oferta integral de soluciones propias y servicios avanzados y de alto valor añadido en tecnología, que combina con una cultura única de fiabilidad, flexibilidad y adaptación a las necesidades de sus clientes. Indra es líder mundial en el desarrollo de soluciones tecnológicas integrales en campos como Defensa y Seguridad;  Transporte y Tráfico; Energía e Industria; Telecomunicaciones y Media; Servicios Financieros; Procesos Electorales; y Administraciones Públicas y Sanidad. Minsait es la unidad de negocio de transformación digital de Indra. En el ejercicio 2017, Indra tuvo unos ingresos de 3.011 millones de euros, 40.000 empleados, presencia local en 46 países y operaciones comerciales en más de 140 países.

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